
Estudiantes de la carrera de medicina que se encuentran realizando el curso de ingreso en este 2018, están pasando por un problema de no tener espacio físico para asistir a las clases en la sede de 7 y 63 de La Plata, y de esta manera, un número importante de alumnos se queda afuera y hasta evalúa dejar la universidad.
En diálogo con NOVA, la vicepresidente del Centro de Estudiantes de Medicina, Rocío Olazar, sostuvo que este año, al igual que el año pasado, hay alrededor de 3 mil ingresantes a la carrera, y lo que sucedió, a diferencia del 2017, las autoridades de la Facultad cambiaron el curso de ingreso”.
Detalló Olazar que “el año pasado estaba organizado en comisiones con una banda horaria de 8 a 18 horas, y este año, solamente con 3 mil ingresantes se armaron dos turnos, uno a la mañana y otro a la tarde, con un cupo de 350 personas. Es decir, 600 personas pueden cursar y el resto queda afuera sin ningún tipo de herramienta para poder empezar a cursar el primer año en condiciones más favorables”.
De esta manera, “desde ayer (lunes) que arrancó el curso ingreso, un montón de compañeros y compañeras estuvieron haciendo fila para poder entrar. Alrededor de las 3 de la mañana empezaron a acercarse al ingreso para poder tener un lugar a las 8 de la mañana en el primer turno. Incluso, un montón se quedó afuera y tuvo que esperar a las dos de la tarde para poder entrar”.
Desde el Centro de Estudiantes “creemos que es una locura, cuando el espacio edilicio es el mismo que el año pasado, hay docentes para que el curso sea diferente, pero no hay voluntad. Es por eso que organizamos, ayer una reunión con el vice decano de la Facultad que nos dijo que hoy nos iba a dar una respuesta, entonces hoy (martes) a las 8.30 hicimos clases públicas en la puerta de la Facultad esperando su respuesta”. En ese sentido, “el vice decano dijo que no tenía nada para decir con respecto al curso de ingreso y que no nos iba a dar más reuniones”.
Rocío Olazar indicó que “queremos formarnos bien, queremos cursar, porque es una responsabilidad que tenemos el día de mañana como futuros profesionales de la salud y no puede ser que se nos esté dejando así sin ningún tipo de contención para poder arrancar el primer año”.
Teniendo en cuenta esta situación, puede llevar a que muchos que vinieron el 22 de enero porque “supuestamente les iban a dar novedades sobre el curso de ingreso, eso no sucedió y hay muchos compañeros que desertan y abandonan la universidad por esta falta de organización. Hoy en día como está el sistema de salud, necesitamos más que nunca buenos y excelentes profesionales médicos”.
En referencia al espacio en donde se cursa el ingreso, en 7 y 63, “evaluamos que la facultad está vacía. Son cuatro pisos donde las aulas están vacías, porque las personas de segundo, tercero, cuarto y quinto, arrancan a fines de marzo. El curso de ingreso se podría cursar tranquilamente allí”.