
General Pinto, Pellegrini, Daireaux, Guamini, Bolívar, General Arenales y Lincoln, son los siete municipios de la provincia de Buenos Aires cuya declaración de emergencia agropecuaria se vencieron en las últimas semanas pese a estar todavía bajo el agua.
Los productores no esperan su tratamiento para después de las elecciones y deberán encarar el pago de impuestos y créditos tanto a nivel local como nacional.
A las localidades mencionadas, a la fecha no se publicaron en el Boletín Oficial tal como señalaron fuentes provinciales las zonas de: General Alvear, Rauch, General Guido, Ayacucho, Maipú, General La Madrid, Pila y Tapalqué. Lo que significa que en total 15 distritos tiene ahora un panorama complicado desde lo productivo y económico.
En ese punto, la bronca de los productores respecto de la falta “de respuesta” por parte de las autoridades del Ministerio de Economía no sólo se debe en la falta de llamado a reunión a la Comisión Provincial de Emergencia y Desastre Agropecuario (Cedaba), sino en no haber aceptado adelantar el encuentro previsto el 27 de septiembre último, el cual tampoco se hizo.
“Esto no es más que un “incumplimiento de deberes de funcionario público“, advirtió la coordinadora de la Comisión de Lechería de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), Andrea Passerini en diálogo con BAE Negocios, quien denunció que “no sólo hay localidades que ni siquiera fueron evaluadas sino que tampoco dieron respuesta de por qué se rechaza una declaración de emergencia”.
Para la productora “cuando hay gente que está bajo el agua o apunto de que le embarguen una cuenta, y no se llama a una reunión de la Cedaba, se está faltando en un incumplimiento y eso lo dice la Constitución“.