En Agenda a la carta, Guido González, analista económico del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), describió a la inflación como un fenómeno “cultural y multicausal”. En este sentido, respaldó la medida de controlar la exportación de la carne, pero advirtió los aumentos de los precios desde que se flexibilizó: “Desde el Gobierno no tienen tan claro el recorrido del día uno a la carnicería”. Además, también apuntó que la carne se “dolariza”.
Uno de los problemas actuales de la Argentina es la inflación. Ante esto, la nueva conducción de la Secretaría de Comercio Interior, a cargo de Roberto Feletti, congeló hasta el 7 de enero el precios de los medicamentos y de más de 1400 productos de consumo masivo. Sin embargo, la nueva preocupación es la carne. En este marco, en el programa radial de este medio Guido González, economista del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), analizó la situación.
“La inflación es cultural y multicausal, vimos en el gobierno de Mauricio Macri causas como la devaluación o el aumento de las tarifas, en este gobierno la falta de control”, comenzó su relato el especialista. En este camino, destacó la intervención en tres sectores, alimentos y medicamentos con el congelamiento y carne con el límite en las exportaciones, y puntualizó en este último rubro.
“La medida sobre las exportaciones logró que la carne no subiera en la carnicería, sin embargo, desde que se levantó sus precios aumentaron cerca del 26%“, detalló González. Otro de los datos que arrojó fue que en la primera quincena de noviembre los precios de la carne subieron 10% con respecto al mismo periodo del mes anterior.
En este sentido, describió posibles causas: “Falta marcar la trasversabilidad del ganado de punta a punta, el Gobierno no tiene tan claro el recorrido de los productos del día uno hasta que llega la carnicería, hay que controlar más esa cadena de valor”. Otra de las razones que aclaró fue la suba del precio internacional de la carne: “El problema es que te venden en la carnicería a precio dólar”.
Asimismo, trazó algunas soluciones y diferenció la situación con la de los medicamentos y alimentos: “No se debe congelar sino volver a regular su exportación y a los productores, ellos están en posesión de aumentar los precios cuando quieren y eso se debe controlar“.