
Según se anunció este jueves, tras casi un mes de negociaciones, el Gobierno y el personal técnico del FMI cerraron un Acuerdo Stand-By de 36 meses que asciende a USD 50.000 millones (equivalente a aproximadamente DEG 35.379 millones o alrededor de 1.110% de la cuota de Argentina en el FMI).
El acuerdo a nivel del personal técnico está sujeto a la aprobación del Directorio Ejecutivo del FMI, que examinará el plan económico de Argentina en los próximos días. Las autoridades han anunciado la intención de girar contra el primer tramo del acuerdo, pero posteriormente tratarán el préstamo con carácter precautorio.
En base al comunicado emitido por el Gobierno, con este plan económico se busca lograr la eliminación de los desbalances económicos que han aquejado a nuestro país por décadas”.
“El plan es consistente y sostenible económica, social y políticamente, y tiene como objetivo continuar reestableciendo el orden marcoeconómico con dos ejes clave: convergencia más rápida al equilibrio fiscal y reducción de la inflación” aseguraron.
También se recalcó que el programa “es innovador ya que protege especialmente a los sectores más vulnerables gracias al monitoreo de indicadores sociales”. Se indicó que en el caso de la economía no crezca del modo que se proyecta, esta previsto un mecanismo que permitirá asistir a los sectores más vulnerables.
LAS METAS FISCALES
En este marco se detalló que para asegurar una más rápida convergencia al equilibrio fiscal, las nuevas metas de resultado fiscal primario son: -2,7% del PBI en 2018 (vs. -3,2% con las metas previas), -1,3% en 2019 (vs. -2,2% antes), equilibrio primario en 2020 (vs. -1,2% antes) y superávit de 0,5% en 2021 (vs. 0% antes).
En tanto, en el acumulado 2018-2021, esto significa una reducción acumulada del déficit de 3,1% del PBI, alrededor de USD 19.300 millones. El nuevo sendero de convergencia fiscal permitirá que el ratio deuda pública a PBI comience a reducirse a partir de 2019.
LAS METAS DE LA INFLACIÓN
Para reducir la inflación el plan refuerza el esquema de metas con tipo de cambio flotante y fortalecimiento de la autonomía del Banco Central. Las metas de inflación son: 17% para 2019, 13% para 2020 y 9% para 2021.
En este sentido se pondrá en marcha un plan que tendrá como objetivo reducir en forma sostenible la inflación para lo que se requiere fortalecer la situación patrimonial del Banco Central que fue seriamente debilitada durante las últimas administraciones.
A partir de este momento, se llevará a cero el financiamiento monetario del Banco Central al Tesoro.
Asimismo, el Tesoro se compromete a un programa de cancelación anticipada de Letras Intransferibles para que el Banco Central pueda, con esos recursos, reducir el stock de LEBAC.
Finalmente, se anunció que se enviará al Congreso un proyecto de reforma de la Carta Orgánica del BCRA reforzando su autonomía.
LOS OTROS PUNTOS DEL ACUERDO
En línea con las condiciones generales de los acuerdos Stand-by, la devolución de cada desembolso se realizará en ocho cuotas trimestrales, con 3 años de gracia.
La tasa de interés será variable y dependerá de la evolución de la tasa de interés del derecho especial de giro (DEG).
Con los valores actuales de la tasa del DEG, se estima que el costo del préstamo será de 1,96% mientras los desembolsos acumulados no superen el 187,5% de la cuota argentina en el FMI (monto equivalente a aproximadamente USD 8.480 millones ), de 3,96% si los desembolsos acumulados superan ese monto, y 4,96% si el crédito vigente se mantiene por encima de ese monto por más de tres años.
FUENTE: EL DÍA